#SocialMediaForReal: El error que no podemos cometer en las campañas de redes sociales

El error que puede provocar que tu campaña en redes sociales sea un fracaso.

Cuando iniciamos una campaña en redes sociales nuestro objetivo es que todo sea perfecto: desde el planteamiento a los resultados, pero hay veces que precisamente por eso puede quedarse fuera de la ecuación un detalle importante, y es que detrás de las redes sociales hay personas reales, como tú y como yo. Lógico, ¿no? Pues a veces no lo es tanto…

Objetivos, estrategias, ideas, acciones, publicaciones, medición de resultados… seguro que en una campaña de redes sociales tienes todo esto en cuenta, pero, ¿te has parado a pensar que tus publicaciones llegarán a personas de verdad? Más allá de algoritmos, estrategias para impulsar las publicaciones o incluso presupuestos para potenciar los alcances, no debemos olvidar este GRAN detalle.

Parece una idea muy evidente, ¿no? Está claro que tras cada cuenta en redes sociales hay una persona a la que queremos llegar, pero a veces cuando nos involucramos tanto en la idea y estamos tan metidos dentro de la temática que estamos tratando podemos llegar a «intoxicarnos» y dejar de ver la realidad del resto del mundo.

¿Qué podemos tener en cuenta para evitar este fallo que puede suponer el fracaso de la campaña?

  • Pensar que quizás las personas a las que nos dirigimos no están tan dentro del universo como nosotros y, por tanto, tengamos que explicar mejor la idea que queremos transmitir.
  • Aunque por otro lado… si tenemos que explicar demasiado quizás la idea es demasiado compleja y no va a funcionar.
  • Si es una acción en la que el usuario tiene que participar (concurso o sorteo, por ejemplo) tenemos que ser razonables con lo que se pide en base al premio: el tiempo es muy valioso y si es demasiado exigente la gente puede pasar de largo. Cuanto más simple sea el sistema de participación, mejor (mientras consiga nuestros objetivos, claro).
  • No publicar mensajes demasiado extensos: así evitaremos el rechazo por parte del usuario y podremos engancharlos con mayor rapidez.
  • Pensar cómo es el día a día de una persona que nos sigue y de personas a las que queremos alcanzar, ¿cuáles son las mejores horas para lanzar los mensajes? ¿Van a tener suficiente tiempo para prestarle atención?

En definitiva, tenemos que salir de nuestra burbuja y mirar más allá, analizar cómo es nuestro público mirando las estadísticas de nuestras cuentas en redes, pensar qué público queremos alcanzar, y establecer la estrategia en base a todos estos factores. No era tan fácil, ¿verdad? La próxima vez no te olvides de este «pequeño» detalle ?